Hoy quiero regalarte un fuerte y cálido abrazo
Hoy quiero regalarte un fuerte y cálido abrazo

Hoy quiero regalarte un fuerte y cálido abrazo

Un abrazo es un arma increíble y poderosa a pesar de la ternura de su origen.

Ayuda a juntar los pedazos rotos de un sentimiento para ponerlos a resguardo y que sus filos no lastimen. Seca lágrimas, brinda calidez, reconforta el alma.

A veces el abrazo llega de quien siempre podría esperarse. Los brazos de una madre están eternamente disponibles para consolar al hijo doliente; sin darlos por descontados, esos son los primeros que uno busca y, siempre que ella continúe en este mundo, los encuentra.

El abrazo virtual —tan recurrente en estos tiempos modernos— de hermanos y primos, compañeros y conocidos, amigos no tan cercanos aún, es también de agradecerse; se siente la buena vibra incluso a través de la distancia y la aparente frialdad de los medios electrónicos. El cariño, los buenos deseos, los ofrecimientos para ir a comer, por un café o por una cerveza. Nunca faltará quien brinde un momento de respiro, una pausa al sufrimiento.

Del otro lado está el abrazo menos esperado. Pudiera venir de aquel amigo que aunque siempre está ahí nunca ha sido especialmente expresivo y, sin embargo, el día que lo necesitaste respiró hondo y te ofreció su hombro sin importarle que lo llenaras de lágrimas, mocos, baba. Gimoteos. Dolor.

Ese abrazo improbable canalizó tus penas hacia tus piernas para que fueran capaces de sostenerte, hacia las palmas de tus manos para que no se soltaran de su espalda y, como el pedazo de madera que salva al náufrago de ahogarse en medio de la tempestad, logró que te mantuvieras a flote.

A veces, más allá de protocolos, durezas e infructuosos intentos por convertir los sentimientos en frías variables de una fórmula, lo único que se necesita es un hombro sobre el cuál renacer, no importa que sientas que tu alma está muriendo. Ya pasará el mal momento y tu memoria atesorará por siempre ese abrazo.

Un abrazo

¿Te ayudó? No te lo quedes; recuerda con una sonrisa este pequeño abrazo virtual y regálaselo a quien creas que lo necesita más.

Pero basta de cursilerías; mejor date una vuelta por esta colección de colaboraciones entre rockeros que seguro te va a encantar.


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2 comentarios

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