Hace tiempo existió una iniciativa llamada Bookcrossing (o Libros Libres, en su versión en español), que consistía a grandes rasgos en liberar un libro cualquiera, dejarlo “olvidado” para que alguien más lo encontrara y tuviera oportunidad de leerlo.
La idea era que, al terminar el libro, su último lector lo dejara de nuevo por ahí, como no queriendo la cosa, para que llegara a más personas y todos tuviéramos nuevas opciones para ampliar nuestro horizonte literario, además de ayudarnos a mejorar la ortografía, incrementar nuestro vocabulario y todas esas maravillas que nos proporciona la lectura hecha hábito.
A pesar de ser una excelente idea, tenía su lado impráctico, como el tener que registrar cada libro liberado en la red para que se le asignara un número clave, imprimirlo, pegárselo, que quien lo encontrara lo rastreara vía Internet y relatara dónde lo encontró, dónde lo dejó, qué le pareció y demás.
Todos esos pasos eran un desmadrito bastante engorroso, así que simplifiqué un poco el concepto:
En lugar de dejar libros abandonados por ahí y ya que estamos más que inmersos en el mundo digital, ¿Qué te parecería disfrutar una pequeña biblioteca virtual aquí, en mi sitio web? Gratis, sin ningún costo, sin suscripciones; por el puro placer de compartir algo que haya leído y me haya gustado y con el compromiso de subir por lo menos un libro o material nuevo cada mes (porque uno no solo vive para publicar aquí, tendrán que perdonar) en este mismo artículo.
¿Cómo? ¡Sencillo! Haz click en el botón que verás a continuación y disfruta.
Te dejo la idea sobre la mesa; echa un vistazo y, si te gusta, compártela con todas las personas que puedas, que hace mucha falta esparcir un poco de cultura y sacarnos de encima la etiqueta de país no-lector que tiene México.
¿Me invitas un cafecito?
